Mudarse o abrir una nueva oficina no siempre resulta una acción sencilla, ya que debe haber un cambio de estructura tecnológica. De acuerdo con Moving en nuestra sección de mudanzas corporativas, existen seis consideraciones necesarias antes de establecer tu empresa en un nuevo inmueble.

Evalúa: es probable que parte de tu tecnología e inventario actual ya no sea apropiado en la nueva ubicación. Si es así, lo mejor es devolver los equipos arrendados; también vender, reciclar o almacenar los dispositivos que requieran reparaciones.

Perspectiva tecnológica: el objetivo es determinar si la nueva área de trabajo se ajusta a los requisitos mínimos del servidor y localizar el sitio idóneo para ubicar las estaciones de trabajo de los empleados, los puntos de cableado, equipamiento, etcétera.

Determina necesidades: debes detallar los requisitos técnicos y de conectividad en la nueva oficina, incluyendo velocidad, latencia, cableado y tiempo de actividad.

Datos protegidos: con el cambio o apertura, el potencial de pérdida de datos de un negocio es alta. Es importante hacer copias de seguridad de los sistemas de datos y mantenerlos en un lugar seguro. Toma las medidas necesarias para asegurar un acceso clave a los datos en cualquier momento.

Transportación: asegúrate de que el equipo esté correctamente empaquetado. Una vez abierta la oficina, realiza una prueba de fondo para asegurar el cableado, el equipamiento y los teléfonos estén configurados correctamente.

Empleado conectados: considera el esparcimiento de nuevas herramientas de colaboración diseñadas para conectar a los empleados que trabajan en casa, de forma remota o la oficina. Recuerda que la comunicación es la columna vertebral de un negocio, por lo que no debes descuidar este aspecto en la creación de una nueva oficina.

Si deseas conocer nuestro servicio de mudanzas corporativas puedes contactar con uno de nuestro asesores el cuál te brindará la información de manera especifica y adecuada a tus necesidades.